Sobre la circunstancia

Con el paso del tiempo he aprendido una lección:

La vida es una cuestión de actitud.

Mi circunstancia nunca podrá ser perfecta pero mi actitud puede ser diferente.

Hace unos días estaba haciendo un reto en instagram para contar cinco cosas que no sabían de mi, y lo primero que se me ocurrió ( y dicho sea de paso no puse) fue que mi vida no siempre es color de rosa y estilo instagram como puede parecer.

No quise ponerlo porque decidí al final poner cinco cosas curiosas que no sabían de mi y no algo tan profundo, pero la verdad es esa.

No muchos saben que lo que atravieso en el día a día es difícil, y mucho.

PERO

Aunque no pueda controlar mi circunstancia, si puedo decidir cómo será mi actitud.

Y yo he decidido mirar la vida a mi favor. Saber que el dolor tiene un propósito y que todo es temporal.

Mi circunstancia puede ser mala, pero mi actitud es positiva.

La vida es un segundo, y queramos o no vamos a atravesar situaciones dolorosas, pero nosotras decidimos esa actitud frente al segundo de la vida.

Tengo unos tips para darte que me han ayudado un montón:

• Sonríe

No te olvides de sonreír más y preocuparte menos.

Te cuento que el preocuparme no sumó nada a mi vida. Al contrario, que devastada quedé cuando dejé que mi circunstancia moviera mi actitud hacia la negatividad.

No voy a negar que es un proceso natural. Llorar está bien. Pero es un proceso y el dolor no puede durar para siempre; pero levantarse, depende de ti.

• Busca el lado positivo (y rosa)

Créeme que todo tiene un lado bueno. Si te contara las veces en las que sufrí por alguna razón y las veces en las que luego de haber salido de ese hoyo vi el lado bueno, no me creerías. He llegado a una conclusión: Todo tiene un lado positivo y bueno. Todo. Y si no lo veo, solo tú puedes decidir buscarlo y encontrarlo.

Aquello que yo miraba y decía "Nada bueno puede salir de esto", la verdad es que sí. Mi carácter cambió, mi personalidad se marcó y maduré.

Todo tiene un lado positivo y bueno. Y muy rosado,pero solo de ti depende el que lo encuentres.

• Tranquilízate y confía

En la tranquilidad y la confianza está tu fortaleza. Quizá tú no puedas hacer nada para que mejores la situación pero debes confiar en que en el momento correcto esa situación mejorará para ti. Confiar es estar en paz en medio de. Confiar es descansar en medio de. Confía. El dolor pasará pero tu actitud determinará cómo atravesarás el viaje.